La meta de nuestro proyecto es promover la agricultura regenerativa a través de la comida.
Origo empezó a tomar forma en 2018, cuando François de Halleux, su fundador, decidió cambiar de rumbo. Después de más de 10 años en Google, dejó su carrera para dedicarse a lo que realmente le apasiona: la alimentación saludable y respetuosa con el medio ambiente.
François eligió centrarse en el pan, un alimento básico que, con el tiempo, ha perdido gran parte de su valor nutritivo debido a la industrialización. Origo, que significa “origen” en latín, representa nuestro regreso a las raíces, ofreciendo un pan altamente nutritivo y saludable, alejándonos de las soluciones modernas llenas de artificios.
Volver a la artesanía
Formado en panaderías de Francia, François se estableció en el barrio de Gracia, en Barcelona, para ofrecer pan hecho con harinas molidas a la piedra, masa madre y largas fermentaciones. Gracias a estas técnicas, nuestros panes son no solo más sabrosos, sino también más fáciles de digerir.
Creamos una forma alternativa de producir alimentos
En Origo, seleccionamos a nuestros proveedores con sumo cuidado, priorizando la agricultura regenerativa y la salud del suelo. Así, creamos una alternativa a la industrialización masiva, volviendo a una forma de alimentarse más sostenible y saludable, en la que cada elección contribuye a cuidar de nuestro planeta.